Los parques arqueológicos más que simplemente sitios arqueológicos, se han convertido en espacios donde convergen procesos de memoria, identidad y patrimonio. San Agustín y Tierradentro particularmente son referentes frecuentes que describen la idea de Nación y su relevancia histórica es tal que aparecen referenciados desde la mítica Comisión Corográfica. Durante los años treinta del siglo XX, ambos parques tomaron un rol central en el desarrollo del sector cultura en Colombia, y se consolidaron como espacios que ilustran el desarrollo de las disciplinas de la antropología y la arqueología. En años más recientes, estos espacios se han convertido en territorios dinámicos donde se han puesto en tensión las dinámicas locales y nacionales, y donde se entiende que los valores del patrimonio no son inherentes ni atemporales, sino son construidos de manera colectiva.